Arte y arquitectura

Helvetica: ayer y hoy

El eterno atractivo de la célebre tipografía Swiss-made

Equilibrio de espacios negativos y positivos, de líneas uniformemente apreciadas, elegantes curvas y trazos verticales bien definidos, Helvetica es el tipo de letra por excelencia de los siglos XX y XXI. Ejemplo del buen diseño, es el modelo de referencia para toda comunicación visual y narrativa limpia, sofisticada y elegante. La limpieza de sus formas y sus contornos expresa eficiencia y modernidad.

Ha nacido una fuente

La tipografía Helvetica ha llegado a definir el diseño suizo moderno. Desarrollada en Suiza por Max Miedinger y Eduard Hoffmann para la fundición de tipografías Haas en 1957, originalmente se llamó Neue Haas Grotesk. Poco tiempo después, en 1960, su nombre pasó a ser Helvetica, haciendo referencia al nombre latino de Suiza.

“En mi opinión, las primeras pruebas tipográficas de la Neue Haas Grotesk, compuestas cuidadosamente a mano e impresas sobre papel de bellas artes son verdaderas obras de arte”, afirmó Alfred, el hijo de Hoffmann, en “Helvetica Forever”. “Puedo sentir el original, la mano del maestro, puedo percibir la intensidad de gris por el excepcional ajuste del molde”.

La fuente sin serifa se caracteriza por su peso uniforme, la igualdad de los espaciados entre las letras, su legibilidad y sus terminaciones limpias. “Puedo descubrir características únicas, como la amplitud de los números y el espaciado deliberadamente estrecho entre las palabras. La experiencia es casi pura felicidad”, afirmó Hoffmann. La tipografía se presentó mundialmente en la feria Graphic 57 en Lausanne, Suiza, obteniendo un triunfo inmediato. Helvetica logró tener un atractivo universal e internacional, capaz de representar, simultáneamente, lo clásico y lo contemporáneo, la sencillez y la elegancia, llegando a convertirse en símbolo del ingenio, la cultura y el estilo de Suiza.

Un fenómeno atemporal

Más de 60 años después, Helvetica sigue siendo la tipografía preferida de diseñadores gráficos de todo el mundo. Con su carácter equilibrado y altamente funcional, representa el gusto contemporáneo y el cuidado al detalle. Ofrece una clara legibilidad de cerca, a larga distancia e incluso en movimiento. Desde los rótulos de las calles pasando por la literatura, la comunicación de marketing y el cine, supone un logro inigualable en la cultura visual.
Posiblemente, quien mejor ha reflejado sus resultados en movimiento ha sido el mítico diseñador Massimo Vignelli para el sistema de metro de Nueva York. Vignelli recurrió una y otra vez a la eficaz tipografía, particularmente, en relación al transporte. Aún podemos ver la elección de Vignelli de Helvetica en un icónico logotipo de unas líneas aéreas, que, sin duda, inspiró más tarde la presencia de dicha fuente entre las estrellas, en el rótulo lateral del transbordador espacial de la NASA.

Nuestros continuos encuentros con Helvetica han llegado a determinar cómo entendemos el mundo que nos rodea. “Las letras nos hablan todo el tiempo. Las tipografías expresan un estado de ánimo, una atmósfera. Aportan un cierto colorido a las palabras”, afirmó el diseñador y autor Rick Poynor en el documental “Helvetica” dirigido por Gary Hustwit en 2007. Paseando por la ciudad, leyendo atentamente los títulos de una librería, analizando las etiquetas de productos de cualquier tipo encontraremos ejemplos de la capacidad innata de Helvetica para comunicar eficazmente una idea, siempre de forma convincente y única, a su lector.

El hecho de que Helvetica haya demostrado comunicar eficazmente un estado de ánimo, un sentimiento, una visión a tantas personas ha dado lugar a una nueva generación de fuentes. La tipografía atemporal de la era moderna ha inspirado decenas de ejemplos equilibrados, y continúa destacando en pleno siglo XXI.
De hecho, la presencia y la influencia de Helvetica siguen siendo una constante a día de hoy. Su diseño atractivo, elegante y refinado siempre está a la vanguardia. “Creo que acierto al decir que Helvetica es el perfume de la ciudad. Es simplemente algo que normalmente no advertimos, pero que echaríamos mucho de menos si no estuviera ahí”, afirmó Lars Muller en “Helvetica”. Década tras década, tanto los diseñadores gráficos como los creadores de tendencias y los innovadores continúan sintiéndose atraídos hacia el clásico contemporáneo Swiss-made.

La tipografía suiza por excelencia

Inmediatamente reconocible como símbolo de la precisión y la excelencia suiza, Helvetica es la tipografía seleccionada por La Prairie para transmitir la esencia suiza innata de la firma. Expresión al mismo tiempo de una larga trayectoria y de una estética que mira hacia el futuro, lo más natural es que La Prairie haya adoptado Helvetica y embellecido sus envases con las estilizadas líneas de esta tipografía suiza única.